Nacido en 1917 en la localidad británica de Minehead, Somerset, Arthur Charles Clarke tuvo desde la infancia dos pasiones: la ciencia y la ciencia ficción. Su hermano Fred recordaría más tarde sus experimentos con cohetes, radio y fotografía; y en “Astounding Days” (1989), el propio Clarke rememoraría el giro que dio su vida cuando cayó en sus manos su primera revista de CF. Para cuando dejó la Escuela Huish en 1936 para marcharse a Londres y trabajar como funcionario, ya había contactado tanto con el fandom del género como con la Sociedad Interplanetaria Británica, fundada en Liverpool por Philip E. Cleator en 1933 (y en la que Clark desempeñaría el cargo de presidente a finales de los 40 y principios de los 50).