En pocas palabras, “Senderos Misteriosos” (“Mysterious Ways” en su título original) fue una de las muchas series derivadas del éxito de “Expediente X” (1993-2002), que por entonces se hallaba entre su séptima y octava temporadas. En esta ocasión, en lugar de plantear misterios que conducían a sus protagonistas hacia los rincones más oscuros y siniestros de lo desconocido, los enigmas tenían una conclusión más, digamos, optimista. El guionista y director Peter O´Fallon desarrolló el concepto de esta serie canadiense (a la que inicialmente iba a llamar “One Clear Moment”, Un Momento de Claridad, aunque al final optó por el nombre de la canción de U2) con la intención de ofrecer un drama de CF orientado a toda la familia y en el que se exploraran temas de corte humanista.