A mediados de los noventa del siglo pasado se produjo un auge en la ciencia ficción literaria sobre colonización marciana. Primero llegó la épica trilogía de Kim Stanley Robinson compuesta por “Marte Rojo” (1992), “Marte Verde” (1994) y “Marte Azul” (1996), una de las obras más importantes de la CF dura de esa década. Siguieron “Marte” (1992), de Ben Bova; “Marte se Mueve” (1993), de Greg Bear; y “Rainbow Mars” (1999) de Larry Niven.