Libros, películas, comics... una galaxia de visiones sobre lo que nos espera en el mañana
miércoles, 31 de agosto de 2016
2011- EVA – Kike Maillo
No tengo muchas oportunidades de reseñar en este blog películas de ciencia ficción producidas en España. Mucho se podría hablar sobre las sombras de la industria del cine en este país, pero está claro que este género en particular suele requerir en su vertiente cinematográfica de inversiones financieras más abultadas de las que suelen estar disponibles recurriendo a las subvenciones y ayudas estatales. Así que, en primer lugar, hay que agradecer la valentía del realizador Kike Maillo al decidir contar una historia inserta en un género con poca tradición en España y hacerlo sabiendo las limitaciones con las que contaba. Lejos de intentar fabricar una gran narración épica apoyada en efectos visuales –lo que hubiera resultado un fracaso por no contar con los medios suficientes-, opta por un guión intimista y cotidiano que, sin embargo, ofrece una propuesta interesante.
viernes, 26 de agosto de 2016
1955- EL FIN DE LA ETERNIDAD – Isaac Asimov
El viaje en el tiempo ha sido uno de los temas favoritos de la ciencia ficción desde que H.G.Wells lo popularizase con su novela “La Máquina del Tiempo” (1895). Bien se utilizara para ofrecer un impactante vistazo al futuro de la Humanidad (caso de la mencionada obra de Wells), bien como mecanismo para articular una sátira (“Un Yanqui en la Corte del Rey Arturo”, de Mark Twain), excusa con la que construir una narrativa no lineal (en “Matadero 5”, de Kurt Vonnegut), como forma de examinar los mitos religiosos (“He Aquí el Hombre”, de Michael Moorcock) o arma ingeniosa con la que obtener venganza y ganarse la redención (“Puerta al Verano”, de Robert A.Heinlein), las cuestiones científicas, filosóficas y humanas que suscita la idea del desplazamiento temporal han cautivado a millones de lectores desde hace más de cien años. De todas las modalidades que puede adoptar el subgénero, la más arriesgada y compleja –especialmente en el formato de novela larga, que no puede apoyarse exclusivamente en la sorpresa del giro final- es aquella que hace del viaje en el tiempo no una excusa o un artificio narrativo para otros fines, sino el auténtico centro de la historia. En este sentido, una de las narraciones más completas, intrigantes e inteligentes que se han escrito es “El Fin de la Eternidad”, de Isaac Asimov.
miércoles, 17 de agosto de 2016
1971- LA NARANJA MECÁNICA - Stanley Kubrick
Resulta difícil generalizar sobre el cine de ciencia ficción de comienzos de los setenta, aunque parece razonable afirmar que si se caracterizó por algo fue por la influencia que sobre él tuvieron las preocupaciones sociales y culturales del momento. A priori esto no es decir mucho, claro. Gran parte de la ficción (CF incluida) encuentra su inspiración o refleja de algún modo la situación política, cultural o social de su época. Pero en los setenta, pareció que los cineastas quisieron hacer más explícito su mensaje, tomar postura y advertir de la deriva que estaba tomando el mundo real. Películas como “La Amenaza de Andrómeda” (1971), “Naves misteriosas” (1971), “Cuando el Destino Nos Alcance” o “La Fuga de Logan”” (1976) presentan futuros bastante negros a base de agigantar y proyectar hacia el futuro determinados problemas.
“La Naranja Mecánica” fue otro de esos films que pueden encuadrarse en dicha corriente distópica. Fue la última y más corrosiva película de la trilogía de CF firmada por Stanley Kubrick, en la que avisaba acerca de los peligros de la tecnología en sus diferentes formas. En muchos sentidos, es una película difícil de defender. El autor de la novela original, Anthony Burgess, la odiaba tanto que cuando realizó una adaptación teatral de su obra, hizo que uno de los personajes que resultan brutalmente apaleados se pareciera a Stanley Kubrick. La venganza de éste, si es que deseara o necesitara una, fue muy sencilla: consiguió que su versión cinematográfica fuera la definitiva.
miércoles, 10 de agosto de 2016
1997- LEXX (y 2)
(Viene de la entrada anterior)
El éxito inicial de la propuesta animó a Donovan a seguir por la misma senda, mezclando sátira y extravagancia. Tras la primera serie de películas, las siguientes tres temporadas girarían en torno a un argumento central. En el caso de la segunda, la Lexx y su tripulación huían del perverso científico loco Mantrid (Dieter Laser), antiguo Biovisir de la Divina Orden, quien creaba una raza de drones autorreplicantes que, para procrearse, acaban utilizando toda la materia existente en el universo de luz, provocando eventualmente su destrucción total. No hay que temer por los protagonistas, sin embargo, porque éstos consiguen escapar al universo oscuro para proseguir sus aventuras allí.
miércoles, 3 de agosto de 2016
1997-LEXX (1)
Las diversas entregas de “Guía del Autoestopista Galáctico” y sus imitadoras son un ejemplo del potencial para la sátira que esconde la ciencia ficción en todos sus formatos. En el ámbito televisivo, mientras que las series del género totalmente volcadas en la parodia han sido relativamente escasas, sí son muchas en las que en un momento u otro han incluido elementos fuertemente satíricos, desde “La Dimensión Desconocida” (1959-1964) a “Expediente X” (1993-2002) pasando por la longeva “Doctor Who” (1963- ). La que ahora comentamos llevó la sátira a nuevos niveles de extravagancia. “Lexx”, como la británica “Enano Rojo” (1988-1999) dispara sus dardos contra la seriedad de la que suelen hacer gala algunas obras de ciencia ficción al tiempo que pone el foco sobre diversos aspectos sociales y políticos de nuestra realidad.